El 28 de septiembre de 2008 publiqué el primer post de
este blog, y durante casi una década me lo pasé muy bien escribiendo en él textos
gamberros y reflexiones que normalmente pretendían divertir más que convencer.
Pero hace mucho tiempo que lo fui dejando.
El 10 de junio de 2017 colgué el último texto que escribí
exclusivamente para este blog. Desde entonces solo he publicado algunos poemas
y los anuncios de mis eventos literarios, algo que ya hago en las redes
sociales y que es innecesario repetir aquí. Este blog hace tiempo que llegó a
su fin y es hora de aceptarlo.
Quizá en el futuro abra otro blog, pero en ese caso
seguro que tendrá otro título, otra voz, otra intención. Otro blog significará
otra aventura literaria totalmente distinta.
No me voy sin antes daros las gracias a todos los que os
habéis pasado en alguna ocasión por aquí. Hoy el perro deja de ladrar para
siempre. Eso no significa que ahora vaya a ser más peligroso. Ni ladridos ni mordiscos.
Al menos de momento.
