viernes, 31 de diciembre de 2010

Nuevo año

De joven no entendí nunca las fiestas
Veía absurdo que toda la gente
bailara a un mismo son
y descorchara
botellas al unísono
ese día en que decimos
con certeza que hace frío
y con dudas que comienza un nuevo año

Ahora que ya no soy joven
y sé que no es nada fácil
que se reúna la gente
encontrar ese hueco y esa excusa
que los convoque a todos
entiendo que hacen falta
esos momentos
marcados, programados, apuntados
en el orden pactado
de los días
para bailar, cantar, darnos la mano

Sé que hace falta que disparen
el corcho que inaugura la carrera
en ese tonto trámite que dice
que lo pasado es parte del pasado
y que ahora empieza un nuevo día
que es el día primero de un nuevo año
que todo puede ser una vez más
que es el mismo combate pero distinto asalto
que aún nos queda el aire suficiente
para volver a intentarlo
para poder seguir
respirando
mientras nos lo permitan
respirando
mientras no nos ahoguen
respirando
mientras no nos disparen
respirando
mientras las hipotecas y los bancos
y las guerras y los asesinatos
los corruptos y los seres depravados
las caídas de la bolsa y del estado de ánimo
no nos quiten el aire que aspiramos

porque todo es posible
mientras tanto


                                    De "Decoración de interiores" (Ed. Amargord, 2010)

2 comentarios:

Unknown dijo...

Desconocido Félix:

Mientras respiremos... Seremos útiles.

¿Fiestas consumistas o fiestas para escapar de la situación actual?

Feliz año desde el Mediterráneo,
Javier

Félix Chacón dijo...

Fiestas al fin y al cabo, Javier. Que pases una Nochevieja estupenda en esa tierra maravillosa en la que vives. Un abrazo.